Cooperativas eléctricas apuestan al trabajo de Kbrones

La Cooperativa kbrones lleva adelante la producción de una línea de ropa de trabajo para varias empresas que integran la Federación de Cooperativas Eléctricas y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires (Fedecoba). Ya son varias las cooperativas de agua, telefonía, gas y otros servicios que se sumaron a los pedidos para comprarle indumentaria de trabajo a la textil del barrio de Barracas.

Kbrones, que integra la Red Textil Cooperativa (RTC), se focalizó en hacer productos con diseños propios y que trasmitan la identidad de cada empresa de forma personalizada. “Se trata de cortes más de vestir, más cancheros y cómodos que los tradicionales equipos de trabajo”, detalla el secretario de la cooperativa y miembro del consejo de la RTC, Marcelo Vargas.

En los próximos días firmarán un acuerdo con la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar). “Buscamos nuevos horizontes, entonces pensamos que las eléctricas podrían necesitar nuestras ropas y así fue. La idea es avanzar y  sumar trabajo”, precisa Vargas.

Y amplia: “En momentos donde el mercado se cierra, los cooperativistas tenemos que trabajar de forma conjunta. Hay que unificar al sector”, aseguró Vargas. Para 2017 esperan hacerse cargo de la vestimenta de todas las cooperativas eléctricas de la región.

El trabajo de Kbrones se enmarca en el proyecto Compre Cooperativo. Una iniciativa de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT) con empresas asociativas de todo el país para fomentar la comercialización organizada y colectiva como proyección nacional.

Kbrones nació en 2010 como  la primera cooperativa de trabajo creada por ex internos, familiares y detenidos en  la Unidad N° 12 de Gorina.  El objetivo era resolver, desde adentro de la cárcel, uno de los desafíos más difíciles para quienes cumplieron condenas: la reinserción laboral. Y lo lograron. Hoy tiene una cooperativa  que produce indumentaria y marroquinería de forma autogestionada.

 Además de estar formada por ex internos y familiares, la cooperativa asoció a varios profesionales textiles de distintas nacionalidades que vivían situaciones de precarización laboral. Esta experiencia inédita se fue difundiendo en otras unidades  del país.

Cooperativa de Gualeguaychú retomó la producción

La textil Ocho Hilos de Gualeguaychú  -dedicada a la blanquería- surgió hace tres años con el apoyo de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), la Red Textil Cooperativa (RTC) y el gobierno de Gualeguaychú. La CNCT, además de prestar asesoramiento, les donó las máquinas industriales para empezar a trabajar. En esa oportunidad, el Municipio se comprometió a colaborar con el alquiler del local. 

Tiempo después la cooperativa dejó de funcionar. En enero de este año un grupo de trabajadoras tomaron la decisión de volver al taller y prender las maquinas para producir. Siete asociados se encargan de la confección, la costura y el bordado de guardapolvos, bolsos y remeras para varias escuelas públicas y privadas de esa zona de Entre Ríos.

“Costó retomar porque no es fácil que nos elijan para hacer un trabajo. Es natural, no nos conocen. Pero también costó mucho ganarnos la confianza de las compañeras. Esta cooperativa dejó de funcionar, muchas no creían que podíamos retomar la actividad. Y acá estamos. Funciona, se puede trabajar desde y para la cooperativa. Nuestra apuesta es esa y nos va bien”, afirma Fernanda Otero, diseñadora de indumentaria que hace seis meses se puso al frente de la Cooperativa Ocho Hilos. 

Las trabajadoras hicieron una fuerte apuestan a la industria nacional y el cooperativismo. Y hoy cosechan sus frutos de forma autogestiva. “Nos jugamos todo en este proyecto. Invertimos nuestro dinero personal para retomar la producción. Pero valió la pena”, afirma la presidenta de la cooperativa. 

“Ya contábamos con las maquinas y el lugar. La oportunidad era única. En un momento donde todo se ha complicado, tener la posibilidad de relanzar una fábrica textil no es para desaprovechar. Nada mejor que hacerlo desde una cooperativa”, destaca Otero.

Actualmente, Cooperativas de Trabajo Federadas de Entre Ríos (Cotrafer) de Gualeguaychú se hace cargo del pago de alquiler y los servicios.En lo que va del año, la empresa que integra la Red Textil Cooperativa ya fabricó guardapolvos, bolsos, chaquetas y toallas para jardines y escuelas primarias de la ciudad entrerriana. 

FUENTE: Revista Cítrica

Las cooperativas textiles le decimos “NO” al tarifazo del macrismo

El jueves 9 a las 10 de la mañana se realizará la movilización  organizada por cooperativas, fábricas recuperadas, movimientos sociales y sindicatos en defensa de amplios sectores de la economía social y solidaria, tras los desorbitantes aumentos en las tarifas de servicios públicos.

La Red Textil Cooperativa (RTC), que integra la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), concentrará en las intersecciones de  las calles Esmeralda y Diagonal Norte (Ciudad Autónoma de Buenos Aires).

“Pedimos que se dé marcha atrás con el tarifazo que afecta a las cooperativas de trabajo, entre otros sectores sensibles de la economía del país”, enfatizó el presidente de la RTC  y dirigente de la CNCT, Joaquín Fernández Sancha. El reclamo comenzará en las puertas del Ministerio de Energía. Después los cooperativistas marcharán hasta el Ministerio de Trabajo para exigir que se retome la Línea Uno, la ayuda económica que el Estado debe brindar a los asociados de cada cooperativa que lo requiera.

El lunes pasado, el Hotel Bauen fue el lugar de encuentro de dirigentes pymes, cooperativistas, de los clubes y centros culturales de Buenos Aires. Allí se delineó una respuesta unificada frente a la política económica del actual gobierno nacional. En ese marco, se definió la convocatoria multisectorial para canalizar los reclamos y organizar las futuras movilizaciones.

“El aumento abrupto de las tarifas de servicios públicos pone en riesgo a la industria nacional, que se encuentra en estado crítico con la apertura de importaciones, la caída de las ventas y el aumento de otros costos por la devaluación”, afirmó Fernández Sancha.

Pymes, cooperativas, empresas recuperadas, clubes de barrio y centros culturales dejaron en claro que las medidas de presunto alivio tarifario que recibieron de parte del macrismo son “insuficientes” y que continuarán con las presentaciones judiciales y las protestas. “Vamos a defender lo nuestro en las calles. Ese es nuestro lugar de resistencia hoy”, concluyó el dirigente cooperativista.

La fábrica textil Creciendo Juntas cumplió 5 años de autogestión

Se cumple el quinto aniversario de la fábrica argentina textil Creciendo Juntas, en plena crisis. En estos cinco años han conseguido mucho, y han mantenido los empleos. Pero los problemas causados por la reciente apertura de importaciones (descenso de las ventas, aumento de precios, etc.), sin políticas públicas de apoyo, han afectado a todo el sector. Junto con otras empresas han reclamado compromisos a las nuevas autoridades, hasta ahora con un resultado positivo.

Fue en 2011 cuando las 28 trabajadoras de las Industrias Textiles Zuco volvían de las vacaciones y se encontraron con que el dueño se había ido y las había dejado sin los aguinaldos, las vacaciones y la quincena. Entonces las mujeres no se quedaron de brazos cruzados y se dispusieron a acampar en la puerta de la fábrica. Dos meses después, sin respuestas, entraron en la empresa y se pusieron a trabajar.

Elsa Vega, presidenta de la cooperativa, cuenta: “tuvimos que ingresar rompiendo la cerradura con un cerrajero y después de cinco minutos teníamos a toda la policía. Nos querían sacar por la fuerza. Resistimos, fue una tensión más o menos de tres horas. Estuvimos ahí y no sabíamos qué iba a pasar hasta que intervino la vicegobernadora”.

Fue allí que hicieron una asamblea en la calle, donde eligieron a las autoridades y el nombre de la cooperativa: Creciendo Juntas, como símbolo de la lucha y la autogestión.

“En ese momento éramos 28 mujeres que nos quedamos sin la fuente de trabajo, pero solo 17 conformamos la cooperativa, porque algunas compañeras se fueron a trabajar a otro lado” continúa Vega. “En ese momento fue difícil, pero hoy tenemos constancia en el trabajo. Producimos unas 3.700 camisas por mes. Todavía estamos confeccionando a fasón, pero también tenemos nuestra marca propia Erría-Eguía, que significa Rioja tierra de pan, en vasco”.

Con el tiempo, la cooperativa se fue fortaleciendo gracias a la integración. Hoy son parte de la Red Textil Cooperativa (RTC), a nivel nacional, integrada por otras 70 cooperativas. Juntas, hace poco hicieron una jornada en la calle pidiendo políticas públicas.

“Si bien nosotras tenemos trabajo, hoy la situación de las textiles es muy crítica. La gente está sufriendo la falta de trabajo, el aumento del precio de los servicios, la baja en la venta de productos y la falta de políticas públicas de parte del gobierno provincial”, agrega Vega. “Cuando el nuevo gobierno abrió las importaciones nos afectó no solo a las cooperativas, sino toda la industria textil. Eso es algo de lo que estamos luchando junto a la RTC , movilizándonos y juntándonos con las autoridades”.

Gracias a la presión las autoridades los recibieron y asumieron algunos compromisos, como continuar con la confección de guardapolvos (indumentaria que utilizan los escolares en las escuelas públicas argentinas) y avanzar en el diálogo con el Ministerio de Seguridad para seguir haciendo la funda de los chalecos antibala. Además, hablaron de cómo seguir con las políticas públicas. Todavía siguen dialogando.

Gentileza de Prensa CNCT